RV: Pensamiento del 12/12/2009
Pensamiento del 12/12/2009.
"Se cuenta que tres yoguis, buscando la perfección, habían ido a
meditar al bosque. Pasó un hombre y, encontrándose con el
primero en su camino, le dio un golpe. ¡El yogui se levantó y le
devolvió dos golpes! Para él la perfección todavía se hallaba
distante, y la historia no relata si reemprendió su meditación.
Continuando su camino, el hombre se encuentra con el segundo
yogui y le da también un golpe. Aquél se levanta para devolverle
el golpe, pero de repente se reprime y se vuelve a sentar. ¡Al
menos éste había aprendido a dominarse! En cuanto al tercer
yogui, recibió el golpe, pero no se dio cuenta y continuó
meditando tranquilamente.
La lección es fácil de deducir: el primer yogui todavía
pertenecía a la categoría de los humanos ordinarios que
responden clamando justicia, y que, desgraciadamente, se dejan
llevar por la injusticia. El segundo era de aquellos que han
aprendido a dominarse, porque han reflexionado sobre las
consecuencias de sus actos; se dicen: «No vale la pena, todavía
complicaré más las cosas.» En cuanto al tercero, estaba tan
evolucionado que ni siquiera sintió que le golpeaban."
Omraam Mikhaël Aïvanho
"Se cuenta que tres yoguis, buscando la perfección, habían ido a
meditar al bosque. Pasó un hombre y, encontrándose con el
primero en su camino, le dio un golpe. ¡El yogui se levantó y le
devolvió dos golpes! Para él la perfección todavía se hallaba
distante, y la historia no relata si reemprendió su meditación.
Continuando su camino, el hombre se encuentra con el segundo
yogui y le da también un golpe. Aquél se levanta para devolverle
el golpe, pero de repente se reprime y se vuelve a sentar. ¡Al
menos éste había aprendido a dominarse! En cuanto al tercer
yogui, recibió el golpe, pero no se dio cuenta y continuó
meditando tranquilamente.
La lección es fácil de deducir: el primer yogui todavía
pertenecía a la categoría de los humanos ordinarios que
responden clamando justicia, y que, desgraciadamente, se dejan
llevar por la injusticia. El segundo era de aquellos que han
aprendido a dominarse, porque han reflexionado sobre las
consecuencias de sus actos; se dicen: «No vale la pena, todavía
complicaré más las cosas.» En cuanto al tercero, estaba tan
evolucionado que ni siquiera sintió que le golpeaban."
Omraam Mikhaël Aïvanho